jueves, 23 de febrero de 2017

Cita...

"Creo que la única religión verdadera consiste en tener un buen corazón."

Dalai Lama

martes, 14 de febrero de 2017

Cita...

"Hay personas que se recuerdan y otras que se sueñan."

De "La Sombra del Viento" de Carlos Ruiz Zafón

sábado, 11 de febrero de 2017

Entrada...

"(...)
- ¿Y si no se puede hacer lo que uno quiere?
- Hay que adaptarse y vivirlo sin tensión, como no siempre es verano y no por eso el otoño es malo."

De "Legado en los Huesos" de Dolores Redondo

Entrada...

"- Cuando uno decide que ama tanto que renuncia a todo lo demás no se queda ciego ni se vuelve invisible, sigue viendo y le siguen viendo. No tiene ningún mérito ser fiel cuando lo que vemos no nos tienta o cuando nadie nos mira. La verdadera prueba se presenta cuando aparece alguien de quien nos enamoraríamos de no tener pareja, alguien que sí da la talla, que nos gusta y nos atrae. Alguien que sería la persona perfecta de no ser porque ya hemos elegido a otra persona perfecta. Ésa es la fidelidad."

De "Legado en los Huesos" de Dolores Redondo

Cita...

"Las ilusiones son peligrosas... no tienen defectos."

viernes, 10 de febrero de 2017

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"- Lo que quiero decirte es que hay batallas que están perdidas antes de empezar, que a veces es mejor no luchar hoy para luchar mañana, que es muy valiente y loable pelear por lo que uno cree, por la justicia de cualquier clase, pero hay que saber distinguir, porque cuando te encuentras con la intolerancia, el fanatismo, o la estupidez, lo mejor es retirarse, quitarse de en medio y guardar tus energías para una causa que lo merezca."

De "Legado en los Huesos" de Dolores Redondo

Entrada...

"- (...) ¿Sabe?, ése es el problema, no aprendemos de la historia, las noticias dejan de serlo apenas unos días después de producirse, en ocasiones en horas, y todo parece del pasado en poco tiempo, pero olvidamos que si no les damos importancia porque ya pasaron, las mismas injusticias vuelven a repetirse una y otra vez."

De "Legado en los Huesos" de Dolores Redondo

martes, 7 de febrero de 2017

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" Lo besó apasionadamente. Adoraba sus besos, la forma en que tenía de acercarse a ella mirándola a los ojos y sabiendo con certeza que harían el amor en cuanto la rozara. Primero buscaba sus manos, las tomaba entre las suyas y las guiaba hasta depositarlas sobre su poecho o su cintura. Después su mirada recorría el camino que más tarde harían sus labios, de sus ojos a su boca, y cuando al fin la besaba sus labios se elevaban por encima del suelo. Cuando él la besaba, percibía la pasión y la fuerza contenida de un titán, pero además sentía la ternura y el respeto del que besa a quien ama. (...) Él le pertenecía a ella y ella le pertenecía a él, y eso era un designio forjado mucho tiempo antes de ser siquiera una sombra de vida. Y sus besos eran el anticipo de lo que el sexo traería después. (...) El sexo con él era un baile, una danza para dos bailarines en la que ninguno de los dos tenía más relevancia que el otro. Él recorría su cuerpo arrebatado de pasión, pero sin prisas ni atropellos. Conquistando cada centímetro de su carne con manos hábiles y besos febriles que depositaba en su piel haciéndola estremecerse. Él conquistaba y se adueñaba de unos dominios de los que era el rey por derecho, pero a los que siempre regresaba con la misma reverencia de la primera vez. La dejaba ser ella, la elevaba junto a él sin dirigirla ni obligarla. Y ella sentía que nada más importaba. Sólo ellos dos."


De "El Guardián Invisible" de Dolores Redondo

Entrada...

" (...) - Pudiste elegir como todo el mundo, pero elegiste no elegir... tampoco a mí me preguntó nadie. Tomé mi decisión y mi camino. (...)"


De "El Guardián Invisible" de Dolores Redondo

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"(...) Cuando se levantaban de la mesa de juego y se despedían hasta el día siguiente, dejaban en la estancia una sensación de energía vibrante, como si se aproximara una de esas tormentas que no llega a estallar pero que son capaces  de erizarte todos los pelos del cuerpo con su electricidad estática. A ella le gustaban aquellas mujeres, le gustaban mucho, porque tenían esa presencia y encanto del que ya está de vuelta  y le ha gustado el viaje. Le constaba que no todas habían tenido vidas fáciles. Enfermedades, maridos muertos, hijos díscolos, problemas de familia y, sin embargo, habían dejado atrás cualquier tipo de resentimiento  y rencor contra la vida y llegaban cada día tan alegres como adolescentes a una verbena, tan sabias como reinas de Egipto. Si con suerte llegaba a ser anciana algún día, le gustaría ser así, como ellas, independientes y a la vez tan arraigadas a sus orígenes, energéticas y vitales, desprendiendo esa sensación de triunfo sobre la vida que produce ver a uno de esos hombres y mujeres ancianos que viven sacando partido a cada día sin pensar en la muerte. O quizá pensando en ella para robarle otro día, otra hora."


De "El Guardián Invisible" de Dolores Redondo

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"Aquél era su pueblo, el lugar donde había vivido más años de su vida. Formaba parte de ella como una huella genética, era el lugar al que volvía cuando soñaba (...) cuando no había pesadillas y su sueño era plácido  y regresivo, volvía allí, a aquellas calles y plazas, a aquellas piedras, a aquel lugar del que siempre quiso irse. (...) Un lugar que ya no existía, porque lo que comenzaba a añorar ahora que estaba allí era el pueblo de su infancia. Sin embargo ahora que había regresado casi segura de hallar signos de cambio definitivo, se encontraba con que todo estaba igual. Sí, quizás más coches en las calles, más farolas, bancos y jardincillos que, como un maquillaje novedoso, pintaban bien la cara del pueblo. Pero no tanto como para no permitirle ver que en su esencia no había cambiado, que todo seguía igual."


De "El Guardián Invisible" de Dolores Redondo