martes, 20 de diciembre de 2011

Entrada...

“Viajé, amé, perdí, confié y me traicionaron…"


De “El Nombre del Viento” de Patrick Rothfuss

jueves, 15 de diciembre de 2011

Entrada...

“Quizá la mayor facultad que posee nuestra mente sea la capacidad de sobrellevar el dolor. El pensamiento clásico nos enseña las cuatro puertas de la mente, por las que cada uno pasa según sus necesidades.

La primera puerta es la puerta del sueño. El sueño nos ofrece un refugio del mundo y de todo su dolor. El sueño marca el paso del tiempo y nos proporciona distancia de las cosas que nos han hecho daño. Cuando una persona resulta herida, suele perder el conocimiento. Y cuando alguien recibe una noticia traumática, suele desvanecerse o desmayarse. Así es como la mente se protege del dolor: pasando por la primera puerta.

La segunda es la puerta del olvido. Algunas heridas son demasiado profundas para curarse, o para curarse deprisa. Además muchos recuerdos son dolorosos, y no hay curación posible. El dicho que <<el tiempo todo  lo cura>> es falso. El tiempo cura la mayoría de las heridas. El resto están escondidas detrás de esa puerta.

La tercera puerta es la locura. A veces, la mente recibe un golpe tan brutal que se esconde en la demencia. Puede parecer que eso no sea beneficioso, pero lo es. A veces, la realidad es solo dolor, y para huir de ese dolor, la mente tiene que abandonar la realidad.

La última puerta es la muerte. El último recurso. Después de morir, nada puede hacernos daño, o eso nos han enseñado.”


De “El Nombre del Viento” de Patrick Rothfuss
"Caminos a Lugares Seguros"

viernes, 18 de noviembre de 2011

[paso firme]



Camino… paso firme y ligero… auriculares en mis oídos… Pink Floyd… Money…  subo el volumen… enciendo un cigarro… hace frío… subo el cuello de mi chaqueta… oscurece y las luces de la ciudad comienzan a encenderse a mi alrededor… la música y el entorno me envuelven… soy el protagonista de esta película, en el papel de chico malo, chico duro… tengo la impresión de que en cualquier momento los chicos del “west side story” vendrán a por mí… estoy tranquilo, seguro, no me preocupa, con un chasquido de mis dedos me los sacaría de encima… soy un chico malo, duro… el peor…

Sigo caminando… la música se detiene… comienza Through her eyes… Dream theater… mi corazón se enternece… miro a la luna cubierta por unas débiles nubes… que belleza… (suspiro)… el bullicio de la ciudad pasa inadvertido… solo veo la luna y las luces de las farolas encendidas de la calle concurrida… camino… una lágrima resbala por mi mejilla dejando un pequeño rastro de sal al secarse por el aire frío… una lágrima de emoción… no sé porque pero me siento alegre, feliz… anonadado por el majestuoso ambiente que me rodea… luna, luces, gente desconocida…

Llego al puerto… la luna reflejada en el mar calmo… sereno… sonidos oscuros… siniestros… The cure… Bloodflowers… me dejo llevar… me siento en la orilla y a mis pies tengo el mar… el reflejo de la luna… la música en mi cerebro… en mi corazón… me siento lleno de recuerdos… recuerdo la angustia que viví… el infierno… y ahora, ahora me siento como resucitado de entre los muertos… me siento vivo de nuevo después de haber estado marchito… me siento poderoso…  me siento con poder de tirarme al agua y caminar…

Soy protagonista de una película, guionista y director… YO!

         Tengo de nuevo el poder de mi vida en mis manos…

lunes, 14 de noviembre de 2011

[sueño]




Uno… dos… tres… cuatro botones… sus manos penetran bajo mi camisa… el roce de sus yemas hace que me erice… mis pelos como escarpias… sus dedos suben por mi pecho… hasta mis hombros… cierro los ojos… sus besos en mi piel… en mi cuello… suaves labios… tiernos… carnosos… su húmeda lengua impregna mis poros… su saliva y su aliento… mi corazón palpita apresurado… con deseo…

Siento como mi camisa se desliza por mis brazos… y mi espalda se desnuda… siento como si una nube envolviese todo mi entorno… mis ojos permanecen cerrados… su boca explora mi pecho mientras su saliva queda en mi torso… pon pon… pon pon… mi pulso cardiaco se acelera… su boca… sus manos… sus dedos… mi corazón… ardo… ardo en mi interior…

Uno… dos… tres botones… mi pantalón descubre mi secreto… crecido… grande… erecto… deseoso… mientras sus manos en mis nalgas me vuelven a estremecer…

Mis labios… su boca en mis labios… suaves roces en mi lengua… mientras… su mano me sujeta grandiosa… subo al cielo en la nube… mi nube… y crezco… crezco en mí…

Mi cuerpo yaciendo desnudo en la cama escucha un susurro… “relájate, duerme y sueña… sueña conmigo cada noche…” y desde entonces lo hago… cada noche sueño con ella… con sus besos y sus labios…